Romain Hugault nació
el 14 de junio de 1979 en Francia. Hijo de un piloto militar francés,
desde su infancia quedó cautivado por el rugido de los motores de pistón
e hizo gala de una gran pasión por la aeronáutica. Es copropietario de
un pequeño avión que transportó al mariscal Alphonse Juin durante la
Segunda Guerra Mundial.
Llegado cierto momento, se vió obligado a elegir entre centrarse en la aviación o bien dedicarse a su otra gran pasión: el dibujo. Finalmente opta por lo segundo y hoy se limita a pilotar durante los fines de semana. Todas sus obras se caracterizan por su temática, muy vinculada a la aeronáutica. A diferencia de otros cómics sobre aviación, se dirigen a un público más adulto.
Es autor de cómics extraordinarios que combinan las historias clásicas de aventuras aéreas con un dibujo excepcionalmente preciso de los aviones. En el año 2005, junto al guionista Régis Hautière, creó su primer álbum, «Le dernier envol» («El último vuelo»); un comic basado en una historia real que narra la última misión de cuatro pilotos de diversas nacionalidades: un kamikaze japonés, un piloto de la USAF, un experto piloto de la Luftwaffe y un piloto francés en el frente ruso.
En el 2006 y el 2007, también junto a Hautière, ilustró los dos tomos del álbum «Au-Delà des Nuages», una historia de amor y aventuras donde dos pilotos rivalizan por el amor de una hermosa mujer. En el año 2007 homenajeó a las chicas pin up que decoraban muchos aeroplanos y bombarderos durante la Segunda Guerra Mundial creando el impresionante álbum «Pin Up Wings». En él Hugault dibujó a hermosas mujeres posando eróticamente junto a un mítico aeroplano de los años 40. Un ingenioso texto explicativo de la viñeta acompañaba a cada una de las ilustraciones.
Entre el 2008 y el 2010, en estrecha colaboración con el guionista Yann, creó «Le Grand Duc», una miniserie en tres partes ambientada en la Segunda Guerra Mundial, que traza la historia de un piloto alemán que lucha en el frente oriental. Luego, entre 2012 y 2013 se dedicó a crear una nueva obra, «Le Pilote à l'Edelweiss», el cual trata de un piloto Francés en la Primera Guerra Mundial. También a trabajado en nuevas ediciones de «Pin Up Wings» y en «Angel Wings», que sigue la historia de Angela Mc Cloud luchando en el pacífico contra los japoneses.
Actualmente, Romain Hugault continúa trabajando activamente en nuevas obras e ilustraciones. En una entrevista reciente, le preguntaron ¿Qué es lo más importante para dibujar un avión? “Observarlo bien, conocerlo, por fuera y por dentro. Es como dibujar un cuerpo humano. Hay que saber la forma de las piezas, los instrumentos. Lo que tiene de ligero y de pesado”. Entre los personajes de Hugault figuran muchas heroínas, varias de ellas aviadoras. ¿Qué le da más placer dibujar, aviones o mujeres? “Jajaja, no puedo elegir: ¡ambos!”.
Llegado cierto momento, se vió obligado a elegir entre centrarse en la aviación o bien dedicarse a su otra gran pasión: el dibujo. Finalmente opta por lo segundo y hoy se limita a pilotar durante los fines de semana. Todas sus obras se caracterizan por su temática, muy vinculada a la aeronáutica. A diferencia de otros cómics sobre aviación, se dirigen a un público más adulto.
Es autor de cómics extraordinarios que combinan las historias clásicas de aventuras aéreas con un dibujo excepcionalmente preciso de los aviones. En el año 2005, junto al guionista Régis Hautière, creó su primer álbum, «Le dernier envol» («El último vuelo»); un comic basado en una historia real que narra la última misión de cuatro pilotos de diversas nacionalidades: un kamikaze japonés, un piloto de la USAF, un experto piloto de la Luftwaffe y un piloto francés en el frente ruso.
En el 2006 y el 2007, también junto a Hautière, ilustró los dos tomos del álbum «Au-Delà des Nuages», una historia de amor y aventuras donde dos pilotos rivalizan por el amor de una hermosa mujer. En el año 2007 homenajeó a las chicas pin up que decoraban muchos aeroplanos y bombarderos durante la Segunda Guerra Mundial creando el impresionante álbum «Pin Up Wings». En él Hugault dibujó a hermosas mujeres posando eróticamente junto a un mítico aeroplano de los años 40. Un ingenioso texto explicativo de la viñeta acompañaba a cada una de las ilustraciones.
Entre el 2008 y el 2010, en estrecha colaboración con el guionista Yann, creó «Le Grand Duc», una miniserie en tres partes ambientada en la Segunda Guerra Mundial, que traza la historia de un piloto alemán que lucha en el frente oriental. Luego, entre 2012 y 2013 se dedicó a crear una nueva obra, «Le Pilote à l'Edelweiss», el cual trata de un piloto Francés en la Primera Guerra Mundial. También a trabajado en nuevas ediciones de «Pin Up Wings» y en «Angel Wings», que sigue la historia de Angela Mc Cloud luchando en el pacífico contra los japoneses.
Actualmente, Romain Hugault continúa trabajando activamente en nuevas obras e ilustraciones. En una entrevista reciente, le preguntaron ¿Qué es lo más importante para dibujar un avión? “Observarlo bien, conocerlo, por fuera y por dentro. Es como dibujar un cuerpo humano. Hay que saber la forma de las piezas, los instrumentos. Lo que tiene de ligero y de pesado”. Entre los personajes de Hugault figuran muchas heroínas, varias de ellas aviadoras. ¿Qué le da más placer dibujar, aviones o mujeres? “Jajaja, no puedo elegir: ¡ambos!”.
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